O como mejora la detención el ABS

T
erminaba la década del 70, las cosas no andaban bien y había que resolver un problema, nadie daba con una solución y este se acrecentaba. Fue entonces gracias a los alemanes que todo pudo terminar de la mejor de las maneras posibles.

¿Cuál fue este problema tan grande que había que atacar? Los aterrizajes de los aviones eran muy inestables pues debido a la gran cantidad de energía cinética que traen, detener esa inercia es un esfuerzo enorme, y debido al bloqueo de las ruedas del tren de aterrizaje, es muy fácil perder el control. Entonces el grupo alemán Bosch decidió solucionar ese tema inventando e incorporando en los aviones un revolucionario sistema, el ABS (Antiblockiersystem) o sistema antibloqueo de frenos.

El ABS es un asistente de frenado que se encarga de tomar el control del sistema cuando las ruedas tienden a perder su giro, trabarse o bloquearse. Esto debe hacerse por un tema de coeficientes de roce, cuando la rueda gira, la zona de contacto del neumático y la calle no tienen movimiento relativo entre si, están las dos quietas, mientras que cuando la rueda se bloquea, esta se desliza estando las superficies en contacto una en movimiento y la otra no. Por eso un sistema electrónico de medición y control se encarga de evitar que la rueda entre en detención.

En cada rueda se encuentra un sensor de revoluciones que está conectado con la unidad central de control electrónico del ABS; las revoluciones (número de vueltas) de las ruedas así medidas se comparan constantemente entre sí y con la velocidad real del vehículo.

En el caso de que la velocidad de giro de alguna rueda disminuya más que otras proporcionalmente, la electrónica detecta el peligro de bloqueo y reduce inmediatamente de forma automática la presión hidráulica del líquido de frenos sobre el circuito de freno correspondiente a esa rueda para que no se frene tanto.

Sensorialmente el conductor no percibe nada en el frenado normal, pero cuando se ejecuta un frenado de emergencia, el Modulo electrónico de ABS toma el control, frenando y soltando presión para evitar el bloqueo de ruedas. Por esta razón se sentirá un ruido bastante fuerte y poco habitual en las ruedas, acompañado de un golpe intermitente en el pedal de freno, pero la frenada se producirá con control absoluto de la dirección y en una menor distancia.

Así que la próxima vez que sus frenos ABS le salven la vida recuerde, todo fue por mejorar la aviación.

Ricardo Barriga C.